CIVILIDAD

"La civilidad está hecha de pequeñas actitudes y grandes acciones que, en conjunto, favorecen la convivencia" François de La Rochefoucauld escritor y filósofo francés

No importa si vivimos en una gran ciudad o en una población pequeña, todos necesitamos de los demás. Desde el momento en el que nos levantamos por la mañana hasta que nos vamos a dormir, siempre estamos interactuando con otras personas: los miembros de nuestra familia, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, etc.

Pero la vida en comunidad no siempre resulta fácil. Es natural que, a veces, las relaciones humanas se compliquen, que ocurran desacuerdos, conflictos, enfrentamientos. Frente a esto, la civilidad es un recurso importante, porque contribuye a que las interacciones entre los ciudadanos sean pacíficas y respetuosas, y que, en consecuencia, la sociedad funcione de manera adecuada. Este valor tiene que ver con la manera en la cual tratamos a quienes nos rodean y sobre la forma en la que deseamos que nos traten. Por eso, muchos relacionan a la civilidad con palabras como "cortesía" o "amabilidad"; piensan que la civilidad es lo mismo que la "buena educación". Pero, la civilidad va más allá: representa un compromiso que todos hacemos para que nuestra conducta contribuya a que la vida común sea mejor. Para ello es necesario que todos cumplamos con nuestros deberes como ciudadanos, que respetemos a los demás y que colaboremos al bien de la comunidad. Es cierto que todos tenemos el derecho a protestar cuando algo nos parece mal o a expresar inconformidad frente a las injusticias. No obstante, también tenemos la obligación de aceptar las opiniones ajenas, a respetar lo que otros han construido y a escuchar lo que el otro tiene que decir.

Vivir los valores. ME IMPORTA MÉXICO.
Edición 2015

¿Mascan chicle las vacas?

Las vacas mascan durante horas sin meterse nada a la boca. Eso es porque mastican y mastican lo que se han comido antes: son animales rumiantes. En el campo, las vacas arrancan grandes cantidades de hierba con la lengua y se la  tragan casi tal cual. La hierba llega a la panza, el primer compartimento del estómago, donde las bacterias hacen fermentar la hierba y la convierten en algo parecido al chucrut. Un par de horas después, ya tranquila y descansando, la vaca hace subir la hierba a la boca para masticarla y triturarla a conciencia antes de tragárselo otra vez para enviarlo a otra parte del estómago, donde comienza la verdadera digestión.

Einstein ¿también era músico?

El físico alemán Albert Einstein es conocido por sus aportes científicos, pero lo cierto es que no era su única pasión. El creador de la teoría de la relatividad, era también un apasionado músico. Las dotes musicales de su madre influyeron en Einstein que a los seis años ya sabía tocar con soltura el violín, su instrumento musical favorito de por vida. Cuando viajaba solía llevar el violín, al que llamaba "Lina", a la espera de alguna ocasión para interpretar a sus músicos preferidos solo o en compañía. Con tal de enfrascarse en la música tocaba con científicos amigos, con vecinos de su entorno o con cualquiera que le ofreciera esa oportunidad.

Se dice que Albert Einstein era admirador de las sonatas de Mozart en particular. 

Gracias a la música, el científico se relajaba mientras distraía su mente en busca de una solución matemática a los problemas de la física; sus compositores favoritos eran Mozart, Bach, Vivaldi, Scarlatti y Corelli.

A pesar de todos sus otros talentos y logros, la música fue lo que hizo más feliz a Einstein. Nunca viajó sin su violín y dijo una vez: 

"La vida sin tocar música es inconcebible para mí. Vivo mis ensoñaciones en la música. Veo mi vida en términos de música. La música me da más alegría en la vida"

.

Einstein, también ha sido motivo de inspiración musical: hay grupos musicales con su nombre, es citado en algunas canciones y en 1975 Philip Glass escribió la ópera Einstein on the Beach donde el instrumento musical más importante es el violín, apareciendo el violinista caracterizado como un Einstein.

Todos debemos ocuparnos por la Prevención de Accidentes.

La responsabilidad y la prevención de accidentes, parecen conceptos distintos, pero en realidad están entrelazados de tal forma que sin uno, no puede existir el otro.

¿Estamos verdaderamente conscientes en todo momento de la responsabilidad que tenemos todos y cada uno de nosotros con respecto al desempeño correcto de nuestra labor y de actuar con seguridad? 

Supongamos que alguno de nosotros ve a un compañero trabajando en un área peligrosa de una instalación, en donde se requiere el uso de gafas de seguridad, y sin embargo, no las lleva puestas. O vemos a un visitante que toca con las manos algún polvo químico para determinar la suavidad de éste. En un caso tal, ¿qué se debe hacer? ¿A quién se le asigna la  responsabilidad de corregir este tipo de problemas o condiciones?

¿Debemos tener la obligación moral de corregir una actitud insegura, para prevenir algún accidente por muy insignificante que parezca?

Muchos de los accidentes son provocados por la ignorancia y por no observar las medidas de prevención, especialmente en el caso de las personas que visitan alguna instalación o lugar de trabajo y que desconocen los peligros presentes en el lugar.

Ninguno de nosotros permitiría que alguien se lesionara, al contrario, estoy seguro de que informaríamos a la persona de los peligros o la alejaríamos a un lugar seguro. Esta es precisamente la forma correcta de actuar.

Cada uno de nosotros, tiene la responsabilidad de que tengamos todos un lugar de trabajo más seguro. Es obligación de todos prevenir los accidentes.

Este tipo de responsabilidad incluye administrar adecuadamente y correctamente los riesgos, informar la existencia del mismo al supervisor o prevenir al visitante. Nosotros somos los que estamos familiarizados con los equipos que se usan en nuestra área de trabajo, por lo tanto depende de todos nosotros el velar por el buen

funcionamiento de los mismos y examinarlos con regularidad, ya que esa es la única manera en que podremos reducir las lesiones causadas por las condiciones inseguras.

Las lesiones se provocan por distintas situaciones o condiciones peligrosas, tales como la existencia de bordes cortantes, problemas eléctricos, exposición a productos químicos, caídas, objetos que se desplazan, etc., para nombrar sólo unos cuantos.

Ninguna situación peligrosa ha existido siempre, puesto que cada una de ellas fue provocada por alguien, o quizás haya sido el resultado del uso y abuso de los equipos y maquinaria.

Alguno de ustedes, en algún momento, será el primero en detectar una condición o situación de riesgo.

Así que volviendo a la pregunta que se expuso al principio de la charla: ¿quién debe preocuparse por la prevención de accidentes y de sentir la obligación de reducir a un mínimo las lesiones?

Recordemos que la Seguridad y Prevención, es responsabilidad de todos.

Tomado del “Supervisor”. Publicación del Consejo Interamericano de Seguridad.

¿A qué velocidad se mueven las placas tectónicas?

La velocidad con la que crecen las uñas de una persona es casi la misma con la que se desplazan las placas tectónicas sobre las que están los continentes: se trata de un movimiento de 2.5 centímetros por año, en promedio. Estos son cálculos que hizo, en la década de los cuarenta, el geólogo Herbert Read, de la sociedad geológica de Estados Unidos, y que se han confirmado con mediciones satelitales.

La corteza terrestre es un conjunto de grandes placas rígidas y frías que flotan sobre un manto fluido y caliente. "Para medir el movimiento las placas, así como gran cantidad de datos geológicos, se usan los gravímetros, que son equipos de gran presición. Se emplean también para la exploración petrolera, minera, de geología y tectónica", detalla Jaime Urrutia Fucugauchi, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM y presidente de la Academia Mexicana de Ciencias.

Fuente:  Quo.  101 Preguntas Inteligentes. Número especial. Septiembre 2014.